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W Budapest estará listo este verano para exhibir en la capital húngara el diseño atrevido, intrigante y de inspiración local de W Hotels

La magnífica arquitectura y el cautivador diseño del hotel reflejan el corazón palpitante del pasado, presente y futuro de Budapest en el transformado Palacio Drechsler

La magnífica arquitectura y el cautivador diseño del hotel reflejan el corazón palpitante del pasado, presente y futuro de Budapest en el transformado Palacio Drechsler

W Hotels Worldwide, parte de Marriott International, se dispone a redefinir el panorama hotelero de Budapest el próximo mes de julio con la apertura del W Budapest. Antes de su esperada apertura, W Budapest desvela las inspiraciones físicas, históricas y sociales del atractivo diseño del hotel. Ubicado en el emblemático Palacio Drechsler, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en la avenida Andrássy, el ornamentado edificio ha sido cuidadosamente restaurado y transformado por los diseñadores de interiores Bowler James Brindley (Londres) y Bánáti + Hartvig (Hungría), que se inspiraron en la rica historia cultural del palacio y sus múltiples identidades como café, centro social y Academia Estatal de Ballet de Hungría.

Tras la apertura del W Rome en 2021, W Budapest muestra la continua evolución del diseño de W Hotels, creando un entorno moderno, acogedor, inesperado y sofisticado para la próxima generación de viajeros de lujo. El hotel, que pronto abrirá sus puertas, ofrecerá 151 elegantes habitaciones y suites, incluida la excepcional Extreme WOW, la versión de W de la Suite Presidencial, así como un bar, un restaurante, el W Lounge y el AWAY Spa, todo ello influenciado por la rica historia, la creatividad y la diversidad de Budapest.

«La llegada de W Hotels a Budapest ofrecerá una experiencia hotelera inesperada y cautivadora y un emocionante próximo capítulo para el icónico Drechsler Palace», ha declarado Jenni Benzaquen, vicepresidenta senior del portfolio de marcas de Marriott International para EMEA. «A medida que la marca W Hotels continúa evolucionando, nos hemos apoyado en sofisticados principios de diseño al tiempo que jugamos con el equilibrio entre la modernidad, y como siempre en W Hotels – un toque lúdico.»

La historia de dos ciudades

El diseño del hotel aúna las dos caras de la ciudad, Buda y Pest, celebrando el rico patrimonio de ambas y jugando con su yuxtaposición. Esto ha inspirado una narrativa de diseño basadea en la “segunda piel” para el nuevo hotel, que crea una intrigante interacción entre materiales en cada lugar. Desde suaves capas y seductores arcos sobredimensionados hasta el uso de mallas metálicas para crear profundidad y dramatismo en las habitaciones, esta estética de “segunda piel” crea espacios que revelan nuevas profundidades cada vez que se experimentan.

A lo largo del proceso de transformación del Palacio Drechsler en W Budapest, el emblemático edificio aportó muchos elementos valiosos que se han adoptado en el nuevo diseño. El encantador patio interior, en el corazón del edificio, se ha cerrado con un delicado techo de cristal en forma de velo que protege el espacio de las adversidades climáticas, consiguiendo un íntimo patio. El diseño único de la quinta planta, centrado en la madera, respeta el diseño original del tejado del palacio, que ha sido restaurado. Por último, un bar clandestino da nueva vida al bar subterráneo del palacio, rindiendo homenaje a los personajes eclécticos y de la alta sociedad que frecuentaron el espacio en el pasado.

Un Spa lleno de secretos

La ilusión inspirada en Houdini cobra vida en el AWAY SPA de W Budapest, donde los espejos y los juegos de agua crean una sensación de espacio y serenidad infinitos. Puertas ocultas conducen a espacios secretos, donde los huéspedes pueden refugiarse del bullicio de la ciudad y disfrutar de momentos de calma y relajación. Un salón, inspirado en los baños termales que han dado fama a Budapest, envuelto en azulejos tradicionales y malla dorada, fusiona el lado histórico tradicional de la ciudad con la modernidad de los hoteles W en una misma estética.

Una historia llena de inspiración

La estética arquitectónica del Renacimiento francés inspirada en el Valle del Loira, está presente en todo el hotel, homenajeando a iconos de la ciudad como la Ópera Estatal de Hungría, los Baños Széchenyi y los edificios vecinos de la avenida Andrássy. Esta estética grandiosa se ha modernizado en el hotel, que presenta vidrieras y una rica paleta de colores verde, coral y azul oscuro, junto con un toque contemporáneo de azulejos de Zsolnay, elementos de iluminación inspirados en joyas y motivos decorativos.

«Cuando comenzamos con este proyecto, contábamos con diferentes fuentes de inspiración de las que nacieron las distintas narrativas. Una de ellas fue el famoso Harry Houdini, cuya obra inspiró nuestra narrativa del diseño de la «gran ilusión». Hemos utilizado los espejos de una forma creativa por todo el hotel para crear ilusiones ópticas en techos, paredes y suelos, permitiendo que el legado de Houdini siga vivo a través de la estética ilusionista de W Budapest», afirma Bowler James Brindley. «Zsa Zsa Gabor, otra celebridad húngara que estuvo a la vanguardia de la introducción de la sofisticación europea en Hollywood en la década de 1940, ha sido también homenajeada a través de diferentes toques de glamour retro».

Durante más de dos siglos, el ballet ha sido una parte fundamental de la escena cultural húngara, y el hotel albergó en su día el Instituto Estatal de Ballet y la Academia Húngara de Danza. El interior del mismo homenaje a la danza de forma sutil a través de suaves tonos rosas, líneas curvas e impresionantes instalaciones de iluminación, inspiradas en la grácil fluidez de la danza. La estética «ballet etoile» se celebra en la suite Extreme WOW totalmente negra y en la suite WOW totalmente blanca, inspiradas en el famoso ballet El lago de los cisnes.

Un eje social para una ciudad hedonista

Budapest ofrece una gran variedad de actividades, mezclando las que se han transmitido de generación en generación con las nuevas tendencias emergentes, creando así una escena social vibrante y ecléctica. En particular, el hotel hace un guiño a la famosa afición al ajedrez de la ciudad a través de su diseño inspirado en el «Gambito de Budapest». Los tableros de ajedrez aparecen de forma inesperada en el suelo de azulejos monocromáticos de mármol, en el espejo del techo del W Lounge inspirado en un tablero de ajedrez, en las habitaciones con paredes de azulejos blancos y negros, y también en las lámparas que emulan piezas de ajedrez para iluminar suavemente todo el hotel. Todo esto se complementa con homenajes a la cultura de los Cafés de Budapest, donde los habitantes de la ciudad empiezan con un café y acaban tomando un cóctel, con zonas de comedor en Nightingale, el restaurante del hotel, que mezclan tonos azules con toques metálicos y asientos al estilo de los de los cafés para crear una sensación de intimidad.

Obras de arte inesperadas

Adam Ellis Studio ha creado obras de arte por todo el hotel que crean conversaciones y conexiones entre sí. Los originales papeles pintados y las piezas enmarcadas, , reflejan una moderna elegancia, atrevidos detalles e influencias húngaras. Desde un trío de tapices de criaturas mitológicas húngaras hasta una zona de bienvenida vestida con obras de arte metálicas verdes y doradas inspiradas en la famosa pajarera de pájaros tropicales de Houdini, suspendida de una cadena de lámpara de araña; las paredes del hotel ofrecen nuevas perspectivas que encienden la curiosidad.

Las suites WOW y extreme WOW están adornadas con un papel pintado hecho a medida que transporta a la cercana Ópera de Hungría, visible desde ambas habitaciones. Inspirado en el gran fresco de su techo, el envolvente espacio representa escenas de dioses griegos tocando instrumentos musicales y disfrutando de la fiesta, acentuadas con delicados toques metálicos. Esta sensación de modernidad se extiende a los cuartos de baño de las suites, donde las criaturas marinas brillan a través de delicados elementos botánicos acuáticos. Estas elaboradas y ornamentadas obras se complementan con obras de arte estáticas enmarcadas en una paleta monocromática, que representan todos los accesorios para «una noche en el teatro». Las fantásticas suites y habitaciones adoptan el diseño “Gambito de Budapest” del hotel, con coloridas obras de arte abstracto que homenajean el juego nacional del ajedrez, junto con atrevidas y oníricas visiones históricas de la ciudad.

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