Ficción

La Casa-Iglesia de Knightsbridge

Hola, como ya sabréis por las revistas, periódicos y medios afines mi nombre es Rodolfo, pero no soy Rodolfo Valentino, ni Rudolf Nuréyev, ni, por supuesto, Juan Rodolfo Wilcock, nada que ver con artistas y personas con intereses similares. Mi apellido se ha puesto tanto de moda que me da pereza escribirlo así que iré al grano para que el tiempo pase más rápido.

He decidido construirme una bonita casa en un pueblo de una isla cuyo nombre aún está por decidir, para ello me he encomendado la enorme tarea de visitar todas las edificaciones que estime de interés para elegir con cuidado los materiales y sistemas constructivos con los que, obligatoriamente, tendrá que diseñar mi Proyectista. Eso sí, será en un plazo no superior a cincuenta visitas.

escalera1

Primera parada: Church of Knightsbridge.

Y hablando de 50… Me informaron de que en el barrio de Knightsbridge (creo que está en Londres) estaba en venta un hogar con ese precio, pero en libras y en millones, al cambio unos 63 de euros o unos 81 de dólares: usad la calculadora. ¡¡Claro que no me dijeron que era una Iglesia!! Qué horror vivir allí, entre ángeles y demonios, en fin, gustos para todos y palabras para todas… (Proverbio de mi pueblo, prohibido ofenderse).

Alan Boublil la compró pero se cansó de ella y se la vendió a un familiar de quién me invitó a visitarla, en el paseo por su interior vi que no estaba del todo mal con sus cuatro plantas, piscina, sala de jacuzzi con techo de hojas de oro, un mini-spa con sauna y baño de vapor, sala de tratamiento, gimnasio y una sala de cine muy coqueta. Tiene un salón con techo abovedado (por la Iglesia, claro), cuatro dormitorios y tres suites y una bañera que no me dejaron probar, palabra. Da un poco de urticaria levantarse un Domingo y mirar por sus ventanas con parteluz (o Ajimeces) pero se pasa enseguida cuando bajas en su ascensor traslúcido. Eso sí, lo que me llevo para mi futuro Proyecto es la escalera, la mal llamada Escalera de Caracol

escalera2

Escalera de Mármol Crema Marfil con tramos curvos

Y es que todos se empeñaban en llamarla «escalera de caracol» y yo ahí, erre que erre, explicándoles que para que fuera una escalera de caracol, como mínimo, tenía que dar una vuelta completa a su eje y volver al punto de partida pero a un nivel superior (evidente). Es una escalera Curva, o Semicurva si preferís, que para el caso lo mismo es, eso sí, con un eje claramente definido: el ascensor.

Los peldaños son macizos de mármol crema marfil, perfectamente escuadrados y pulidos por todos los lados vistos, fíjate que cada peldaño podía pesar hasta los 80 kilos y eso siempre es una ventaja porque… ¡A ver quién los mueve cuando están bien colocados!

Cada uno de los peldaños apoya en una base metálica que se sustenta en dos zancas del mismo material; una de ellas siguiendo al ascensor en su contorno y la otra en el exterior, sosteniendo el barandal de cristal.

escaleravista

El Detalle y el Anclaje

Para mí el detalle está en las luminarias LED (Light-Emitting Diode o Diodos Emisores de Luz) que aparecen en el fondo de los peldaños y que, con mucho ingenio, alguien decidió elevar la plataforma que los sustenta casi un centímetro de forma que, escondidos justo debajo de ella, brillaran triunfalmente los pequeños Diodos. Una gran idea, sobretodo de noche claro está.

En esta escalera hay dos puntos clave que deben estudiarse con interés, y estos son los dos anclajes: el superior y el inferior.

En el caso del inferior, en la planta sótano del edificio, está claro que se realizaría una pequeña zapata de hormigón armado donde anclar la base o pié de cada una de las zancas laterales de la escalera. Lo mejor en estos casos es soldar una plataforma en la base de la zanca y a ella atornillar los hierros que la sujetarán al taco de hormigón. ¿Por qué atornillar y no soldar? Bueno, nunca se sabe cuándo querremos cambiar la escalera… y eso nos permitirá realizar la zapata primero y llevar la estructura de la escalera después.

Placa anclaje02

En el extremo superior, o en cualquier extremo que amarre la escalera a un forjado, actuaremos parecido pero en vertical: base con pernos de anclaje sujetos al forjado a los cuales se acoplará después la escalera. Los pernos deberán tener longitud suficiente y patillas para contrarrestar los momentos o fuerzas que tienden a hacer girar los anclajes.

Bueno, objetivo cumplido, ya tengo una escalera para mi futura construcción. Adiós.

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

A %d blogueros les gusta esto: