La empresa instalará 155 ascensores y 22 escaleras mecánicas en el Aeropuerto Internacional de Pekín-Daxing, que complementará el actual aeropuerto internacional de Baiyun de la aerolínea en Guangzhou.
China Southern Airlines tendrá ahora dos aeropuertos de referencia, a su actual base de Guangzhou, se le unirá el “macro Aeropuerto” Internacional de Pekín-Daxing , aún en fase de construcción. Situado al sur de Pekín, representará una nueva visión para la movilidad entre ciudades. Thyssenkrupp Elevator, actual y único proveedor del nuevo aeropuerto de la compañía aérea china, contribuirá con la instalación de 155 ascensores y 22 escaleras mecánicas.
Con este total de 177 dispositivos de movilidad, Thyssenkrupp asegurará en todas las instalaciones la movilidad confiable, eficiente y cómoda que requiere un proyecto de esta envergadura. A pesar de la gran escala de la terminal principal, sólo se tardará 8 minutos desde el control de seguridad hasta las puertas de embarque más lejanas.
Se trata de un tipo de servicio aeroportuario que Thyssenkrupp Elevator ya ofrece en otras grandes terminales de todo el mundo, como el Aeropuerto de Heathrow en Londres, el Gran Aeropuerto Internacional de Estambul y El Aeropuerto Internacional Hamad en Dubai.
Los planos para las instalaciones del inmenso aeropuerto han sido diseñados por el prestigioso arquitecto Norman Foster, mientras que la terminal principal, que presenta forma de hexágono, es obra de la ilustre arquitecta Zaha Hadid. Con sus casi 700.000 metros cuadrados, la terminal se convertirá en la más grande del mundo. Además, los visitantes disfrutarán en la quinta planta de unas vistas que alcanzan más allá de las puertas de seguridad, por lo que los pasajeros podrán despedirse de sus seres queridos incluso tras pasar el control de seguridad.
Este proyecto de 62 hectáreas es la mayor inversión hasta la fecha de China Southern Airlines, una de las aerolíneas más grandes del país asiático. En 2018, la compañía aérea transportó a 4,42 millones de pasajeros desde su aeropuerto base en la provincia de Guangzhou, lo que significa un aumento del 8,6% desde el año anterior. Por su parte, el nuevo aeropuerto en Pekín soportará el paso de 45 millones de pasajeros en su primera fase, aumentando posteriormente hasta convertirse en el mayor aeropuerto del mundo en cuanto a número de pasajeros. La compañía también albergará hasta 200 aviones en esta etapa.
“Nos sentimos muy orgullosos de haber sido elegidos proveedores para este gran proyecto. China Southern Airlines es uno de los activos más importantes en la industria aeroportuaria de China, por lo que es crucial proveer de soluciones de movilidad de calidad que permitan a la aerolínea continuar ofreciendo el mejor servicio a sus clientes”, aseguró Peter Walker, CEO de Thyssenkrupp Elevator.